Todos llevamos dentro el niño que fuimos. Cuidar al niño interior es de vital importancia para la mejora emocional y para mantener una sana autoestima. Casi todos en la infancia hemos tenido heridas emocionales y, si no las solucionamos en su momento, el niño interior estará dañado. El sanar nuestro niño interior nos permite liberarnos de nuestra carga neurótica.
El sanar nuestro niño nos posibilita ver y entender lo que vivimos, sin quedarnos atados a la emoción de dolor. 


He descubierto con la guia maravillosa de los ángeles que el trabajo con el niño interior es sumamente útil para curar las heridas del pasado, para reescribir la vivencia desde un punto de vista de amor y no de dolor.
De la mano de los ángeles he desarrollado métodos y técnicas para la sanación y reconexión con ese pequeño asustado, tenebroso y necesitado de afecto que está dentro de ti. esperando para ser escuchado, atendiendo y amado.


*Separa tu cita ya y comienza a experimentar lo que es vivir una vida plena, feliz y libre.


Tu niño interior necesita saber que tú lo amas.
Tómate un momento ahora mismo y dile que te interesas por él: «Te quiero. Me importas. De verdad te quiero».